El Ayuntamiento ha ampliado la zona a ocupar por el mercado para dar cabida en el recito a todos los puestos de alimentación, y los compradores no podrán acercarse a menos de dos metros
Los mercados semanales que se celebran los miércoles en los barrios de La Torrica y Campoamor, se reanudarán mañana ya que la Fase 1 del Plan de desescalada permite la celebración de esta actividad. Se unificarán las dos ubicaciones del mercado, la de La Torrica y la de Campoamor, en un espacio único que será el Recinto Ferial, con el fin de poder controlar la entrada y salida de los clientes. Además, el Ayuntamiento ha ampliado la zona a ocupar para dar cabida a los todos los puestos autorizados para la venta de productos alimentarios.
El mercado de La Torrica tiene 209 puestos, de los que 72 son de productos de alimentación, y el de Campoamor tiene 110 puestos, de los que 47 son alimentación. A partir del miércoles se celebrarán en el Recinto de Fiestas, que estará vallado, para garantizar la seguridad de trabajadores y compradores. Habrá un único acceso para entrada y salida al recinto por la calle Verónicas.
Dentro del mercado se llevarán estrictas medidas de seguridad, la distancia interpersonal mínima entre los trabajadores será de dos metros, la distancia entre los puestos del mercado, y entre estos y los viandantes, será de dos metros, los vendedores deberán contar con mascarillas y guantes desechables, y disponer de gel hidroalcohólico para la limpieza de manos. El uso de mascarillas será obligatorio cuando no pueda garantizarse la distancia de seguridad interpersonal de aproximadamente dos metros entre el trabajador y el cliente o entre los propios trabajadores. Los trabajadores deben atender a los compradores de uno en uno.
Los puestos deberán disponer de papeleras. No se podrá poner a disposición de los clientes productos de prueba, y los compradores no deben tocar los productos.
Además, se promoverá el pago con tarjeta, evitando, en la medida de lo posible, el uso de dinero en efectivo. Se limpiará y desinfectará el datáfono tras cada uso, así como el TPV si el empleado que lo utiliza no es siempre el mismo.